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viernes, 27 de enero de 2012

Un día cualquiera *_*

Un día en el instituto, donde nos conocimos por primera vez. Era verle y pararse el mundo, querer que no me abrazara para no volverme loca. Y el tiempo es sincero, el imán que nos atrae nos impide separarnos, estaban ya atados con cadenas nuestros corazones. Y ahora, mi otra mitad está donde debe estar, conmigo.


Aquel día que llovía a cántaros y él saltó en medio del charco solo para mojarme, y acabamos empapados los dos, riéndonos bajo la lluvia. Aquella mañana que nos pintamos el nombre en nuestra piel y hacíamos lo imposible para que no se borrara la tinta. Aquella vez que mirábamos las estrellas en mi jardín, mientras yo apoyaba mi cabeza sobre su hombro. Aquella tarde que, entrenando, le metía un gol y lo celebrábamos a nuestra manera, siempre recibía su venganza. Aquellos momentos en la piscina, que me cogía y si estaba con toalla, toalla que iba al agua conmigo. Mis clases de inglés y nuestra pequeña frase "Yo te doy my life" Mi gemelo de chándal. Mi niño tonto que me roba sonrisas sin permiso. Me coge en brazos para que toque el cielo, pero ya lo consigue con sus besos. Y ¿Sabes qué? Algún día le conseguiré hacer 3 chichos en la cabeza y será mi Tinki Winki, mi teletubbie. Recuerdo aquel día, creo que me llegó a doler la cabeza de tantos cojinazos que nos dimos. Nos esperamos siempre al final del pasillo del instituto, sonreímos tontamente como si no hubiera persona más perfecta en el universo. Eres mi "Quezito" y nos "amezamos para siemfínimo" Recuerdas? Tirábamos piedras al mar a ver cuál rebotaba más. El jefe de estudios nos prometió enviarnos una foto de nosotros a casa, y aún sigo esperándola, sería un bonito recuerdo. Mientras tanto seguirás en mi pequeño corcho donde guardo a las personas más importantes de mi vida. Necesito parte de otra vida, y todo el tiempo del mundo para escribir todos nuestros momentos, solo es un pequeño resumen, acortado a más no poder.Y como normalmente dicen, se guarda lo mejor para el final. Esa noche del 17 que estaba pegada a él para no coger frío, en medio de la calle tirados, riéndonos como auténticos críos. Un claro ejemplo de amor. Las tonterías y las estupideces que hacemos nos van haciendo cada vez más felices. Hasta nuestros nombres pronunciados a la vez suena estúpido, es genial. Tú para mi, yo para ti, y en otra vida, seguiré siendo tu chica, mantendremos nuestras promesas de ser solo nosotros contra el mundo.


Always is the name we give to our love.

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