Ni tu habitación es un palacio ni tu eres una princesa,

En ocasiones desearía volver a aquel tiempo en el que mi ilusión conseguía convertir mi habitación en el mas grande de los palacios y yo me convertía en la princesa del cuento, en que todos mis peluches cobraban vida propia y podía compartir con ellos grandes aventuras, que con una simples toallas colocadas de la forma correcta creaban una tienda de campaña en la que resguardarte. Hoy en día esa ilusión, esa que te llevaba a los mundos mas lejanos donde todo lo que pudieras imaginar podía convertirse en real, esa ilusión de cuando tenias 5 años y solo querías jugar, reír, saltar...que el único dolor que podías llegar a sentir era de una caída tonta con la bici, pero todo se solucionaba con un "sana sanita culito de rana si no sanas hoy sanaras mañana", esa ilusión de levantarse primero que nadie para despertar a todos los demás para seguir jugando, esa ilusión hoy en día tan solo es un bonito recuerdo. Que bonita era la inocencia, pero un día de repente y sin previo aviso descubres que ni tu habitación es un palacio ni tu eres una princesa.